Introducción
La música es una expresión artística que ha estado presente en la humanidad desde tiempos inmemoriales. A través de ella, se han transmitido emociones, pensamientos y culturas. Cada país tiene su propia música, con sus ritmos, instrumentos y letras que reflejan su identidad. En este artículo nos enfocaremos en la música de Tunez, específicamente en la canción «Kelmti Horra» de la cantante Emel Mathlouthi.
Música Tunez
Tunez es un país ubicado en el norte de África, conocido por su rica historia y cultura. Su música es una mezcla de influencias árabes, africanas y europeas, lo que la hace única y diversa. Los ritmos más populares en Tunez son el Mawwal, el Chgouri y el Mezoued, y los instrumentos más utilizados son el Oud (guitarra árabe), el Darbouka (tambor) y el Nay (flauta).
«Kelmti Horra» de Emel Mathlouthi
Emel Mathlouthi es una cantante y compositora tunecina, conocida por su música que combina sonidos electrónicos con elementos de la música tradicional de su país. En 2012, lanzó su álbum debut «Kelmti Horra» (Mi palabra es libre), que se convirtió en un himno de la revolución tunecina.
La letra
La canción «Kelmti Horra» tiene una letra poderosa y significativa, que refleja la lucha por la libertad y la justicia social en Tunez. A través de sus palabras, Emel Mathlouthi transmite un mensaje de esperanza y resistencia ante la opresión y la represión.
El video musical
El video musical de «Kelmti Horra» es una obra de arte visual que complementa perfectamente la letra de la canción. Fue filmado en las calles de Tunez durante la revolución, mostrando imágenes de la protesta pacífica y la represión violenta del gobierno. También presenta a Emel Mathlouthi cantando en un escenario en ruinas, simbolizando la lucha y la resistencia del pueblo tunecino.
Impacto y reconocimiento
La canción «Kelmti Horra» se convirtió en un himno para la revolución tunecina y fue ampliamente difundida en todo el mundo, recibiendo elogios y reconocimiento de artistas y medios de comunicación internacionales. También fue utilizada en la banda sonora de la película «La vida de Adèle», ganadora de la Palma de Oro en el Festival de Cannes en 2013.
Conclusión
La música es una forma poderosa de expresión y «Kelmti Horra» es un claro ejemplo de ello. A través de esta canción, Emel Mathlouthi logró transmitir un mensaje de libertad y resistencia, y se convirtió en un símbolo de la lucha del pueblo tunecino por la justicia y la democracia. Sin duda, «Kelmti Horra» es una pieza musical que trasciende fronteras y culturas, y nos recuerda el poder de la música para unir y transmitir mensajes de cambio y esperanza.
Fuentes
- https://www.worldmusic.net/guide/music-of-tunisia/
- https://www.npr.org/2012/03/26/149407802/emel-mathlouthi-the-voice-of-tunisias-revolution
- https://www.theguardian.com/music/2012/mar/04/emel-mathlouthi-kelmti-horra-review
